RECITALES Y ARTÍCULOS

jueves, 29 de noviembre de 2018

NIÑO EN SU CUARTO


En su pequeño cuarto
mide el niño su esfuerzo:
No le llega la mano
a abarcar el lomo de tanta hilera
de obligados libros.
Vive enredado
en el rescoldo
de las palabras,
en la trenza de humo de los sollozos
que suben
de la cocina
y que en la melanina de su mesa
ensimismado
las vierte
en espirales de tinta.
Que él no tiene aún
lejanías en la cabeza:
la primera muerte,
la ultima pequeña vida…

Tras la pared,
al  llamarle
su padre para la cena,
su dedo de saliva
borra
su encaracolado  rompecabezas.
Apaga la lámpara.
Se pone de pie
chirriando la silla….  
Y se ve otro
en el súbito destello
reflejado en  el cristal
de la ventana…
      -"¡Ya voy, ya voy!"
Por el largo pasillo,
el eco de su voz
le suena a otro niño
que en su mismo cuarto,
mañana, oirá la suya,
tras la pared…

Antes de cruzar
la puerta del comedor,
por primera vez, 
ensaya,
fuerza una sonrisa…
                ©Rubén Lapuente Berriatúa

domingo, 18 de noviembre de 2018

CALCETINES ROJOS

                     

Subían a la última planta  
En el ascensor
se conjuraron
no esbozar
ni una leve amarga mueca
Estaban allí
por la ventura aquella
de coincidir un día
en un patio con sol de la infancia
Avasallando
la habitación blanca
invitaron a su mujer
a deambular un rato
por el largo pasillo
Un cartel de no molesten
lo dejó bailando
el último en cegar la puerta
Dicharacheros
le descubrieron los pies
por si llevaba aún
aquellos pioneros
calcetines rojos
ese pellizco púrpura
que asomando insolentes
en la última fila
incitaba a todos
a la rebeldía
Ocupando un trozo de su cama
se rieron de los sueños
que no habían alcanzado
Que tarda uno en aprender
que la felicidad
no hay que ir a buscarla
que consiste en no tener  
casi deseos     
ni miedos
Manos en su hombro
en sus tobillos angostos
manos en sus manos…
Destellos como de un trozo de espejo
de la manecita de un niño al sol
hablaban aún por el nidal
oscuro de sus ojos
Salieron haciendo planes de verse
De no esperar  
a ese trámite de la muerte
para clavar la mirada
en la  lluvia del recuerdo
De arrebatarle al tiempo
nuevas horas de oro
                                   ©Rubén Lapuente

martes, 6 de noviembre de 2018

LA NÁUSEA



Si estás solo cuando estás solo, estás en mala compañía(J.P.Sartre)
 Estás boca arriba en la yerba
y en un tris  sin pensarlo  ya te has subido
a la grupa de esa nube

al lomo de una
que parece un pez puro del cielo
y que te lleva a recorrer la tierra
ésa que de pronto
alguien desde dentro tuyo
se la imagina como una pizarra azul
y en donde todo lo que se mueve
deja una estela de tiza tras de si
sí    que desde el cielo
fueran rayas de tiza rastro de la existencia
Caminos de vida de tiza
la única huella al ir pasando…
Tú solo ves eso
líneas que van y retornan
que avanzan     que bailan…
ese blanco roto de ovillo de años
lo vas viendo enmarañarse...
cada historia
la tuya también
es un garabato de tiza
y sólo desde el cielo se ve así
lo ves tú así
rayas como estelas avanzando
de casa  a la fábrica  al bar   al sueño
se entrecruzan  se confunden
unas lentas  otras tendidas    inmóviles algunas
rematadas ya por un cabo de quietud…
y tú a la espalda de una nube
de la que aún no sabes
que va encinta de olvido
o de oscuridad de sueño
o de aguaceros
hasta que su lluvia
borra las rayas sin vida
las que ya nunca se moverán   las borra
en ceniza de tiza las diluye…
y tras la tormenta
otra vez las líneas
que vienen  que vuelven   que avanzan
que bailan…
la tuya también
garabato
parado ahora boca arriba en la yerba…

y te viene la náusea
                   ©Rubén Lapuente